El cangrejo ermitaño
tiene un deseo:
que en su cabeza calva
le crezca pelo.
El cangrejo ermitaño
tiene un antojo:
pasar sus vacaciones
en el Mar Rojo.
Y cuando mira al cielo
lo que desea
es subir a la luna
con la marea.
Ana M.ª Romero
Columpio de versos Ed. Brosquil
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