2.04.2018

Poemas desde el amor I


Dentro de las actividades incluidas en nuestro proyecto de lectura, se encuentra la conmemoración de efemérides. Para conmemorar el próximo día 14 de febrero, nos hemos tomado la licencia de jugando con su nombre transformarlo  en “Día del amor en la poesía”.
Para ello os proponíamos, trabajar con nuestro alumnado en la composición de versos o la copia de versos, para dedicarlos a sus seres queridos.
Por ello y sabiendo lo complicado de esta empresa, ya que cada uno tiene su poemas de amor y lo entiende de forma diferente, recabamos algunos versos sueltos, que por lo menos, seguro que nos conmoverán.Si queréis disfrutarlos completos, todos los encontramos en nuestra entrada la "Poesía de la semana"

Solo me queda el corazón. Palabras
ya no me bastan. Sobra el pensamiento.
Solo me queda el corazón, más grande,
cada vez más amargo y más sediento.
Pilar Paz Pasamar.

NO TE QUIERO sino porque te quiero
y de quererte a no quererte llego
y de esperarte cuando no te espero
pasa mi corazón del frío al fuego.
Te quiero sólo porque a ti te quiero,
te odio sin fin, y odiándote te ruego,
y la medida de mi amor viajero
es no verte y amarte como un ciego.

Pablo Neruda

“Mi pecado es terrible;
quise llenar de estrellas
el corazón del hombre”
Marcos Ana

Cultivo una rosa blanca
En Junio como en Enero,
Para el amigo sincero,
Que me da su mano franca.
José Martí

El corazón es agua
que se acaricia y canta.
El corazón es puerta
que se abre y se cierra.
El corazón es agua
que se remueve, arrolla,
se arremolina, mata.
Miguel Hernández

 Tus manos son mi caricia
mis acordes cotidianos
te quiero porque tus manos
trabajan por la justicia
si te quiero es porque sos
mi amor mi cómplice y todo
y en la calle codo a codo
somos mucho más que dos
Mario Benedetti

Tristes guerras
si no es amor la empresa.
Tristes. Tristes.
Tristes armas
si no son las palabras.
Tristes. Tristes.
Tristes hombres
si no mueren de amores.
Miguel Hernández.

Ama si eres Amor, que si procuras
descubrir, con sospechas y recelos
en mi adorado sol nieblas escuras, 
en vano me lastimas con desvelos.
Trate nuestra amistad, verdades puras:
no te encubras, Amor, si quieres celos.
Lope de Vega
Es el amor, según abrasa, brasa;
es nieve a veces puro hielo, hielo;
es a quien yo pedir consuelo suelo,
y saco poco de su escasa casa
Francisco de Quevedo

¡Y tanto, y tanto te amo
que mis palabras mueren
en un rumor de besos sin descanso!
Gabriel Celaya


Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.
Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.
Juan Gelman

Escribí en el arenal
los tres nombres de la vida:
vida, muerte, amor.

Una ráfaga de mar,
tantas claras veces ida,
vino y los borró.

Miguel Hernández

Dame la mano y danzaremos
dame la mano y me amarás.
Como una sola flor seremos,
como una flor, y nada más…
Gabriela Mistral

LLegó con tres heridas:
la del amor
la de la muerte
la de la vida.
Miguel Hernández.

Si tú me abandonaras te quedarías sin causa
como una fruta verde que se arrancó al manzano,
de noche soñarías que te mira mi mano
y de día, sin mi mano, serías sólo una pausa;
Félix Grande

¡Ahí viene mi cabra guapa!
(La quiero tanto como a una dama)
¡Qué bien camina, miradla!
¡Cómo mira y cómo indaga!
¡Cómo de pronto se para!
........................
yo sé que es una mujer
que está escondida en la cabra.
 Juan Ramón Jiménez.

Una mujer morena
resuelta en lunas
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete niño
que te traigo la luna
cuando es preciso.
Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus labios
relampaguea.
Miguel Hernández

Quiero, a la sombra de un ala,
Contar este cuento en flor:
La niña de Guatemala,
La que se murió de amor.
José Martí

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Pablo Neruda

Los suspiros son aire
y van al aire. Las lágrimas son agua y van al mar.
Dime, mujer, cuando el amor se olvida,
¿sabes tú adónde va?
Gustavo Adolfo Bécquer

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