LAS GOTAS
Erase una vez una gota de agua llamada Gotita. Nació en la desembocadura
del "río Ebro".
Gotita tenía 3 hermanos, “eran una niña y dos niños". Ellos vivían en
el "mar Mediterráneo". Un día jugando por el mar, en la gota park,
descubrieron cosas muy interesantes...
Gotita muy sorprendida dice: veo una estrella allí lejos, los hermanos de
gotita le preguntan: ¿en el mar? y gotita responde: no tontos, en el cielo y
más cosas. Los padres de Gotita, le dijeron a ella y a sus hermanos que no se
les ocurriese salir de casa bajo ningún concepto, pero Gotita y sus hermanos no
obedecieron, deseaban explorar ese lugar tan mágico y maravilloso.
Al día siguiente, se marcharon rumbo a su aventura. Llegó el gran momento,
cruzaron por fin "el mar Mediterráneo, el océano Atlántico y el mar
Cantábrico" y llegaron a un mar desconocido. Allí encontraron a cuatro
gotas pequeñas sin padres y sin hermanos, eran turistas del mar Rosa, se
llamaban: Lucía, Beatriz, Luis e Ismael. A Ismael le llamaban: la gotita
guapetona. Se hicieron muy buenos amigos, tanto que volvieron juntos al río
donde nacieron.
Los padres de Gotita adoptaron a los cuatro adorables amiguitos que
llegaron con sus hijos y se convirtieron en una gran familia.
Pasado un tiempo el Sr. Gotín y la Sra. Gotina, los matricularon en el
colegio de Gotita llamado: Mis Gotitas Molonas. Era un colegio realmente
sorprendente, actividades, manualidades, juegos, magia etc.
Gotita y sus hermanos fueron realmente felices y colorín colorado, este
cuento se ha acabado.
LUCÍA MIÑARRO
¿?
Erase una vez, cinco gotas de agua que querían pasar un día divertido
y una dijo:
- ¡Amigas vámonos a algún sitio juntas!
- ¡Vámonos al canal! -dijo una de las gotas de agua.
- ¿Al de la tele? -pregunto otra.
- ¡No, al canal del agua! -exclamó.
Entonces se fueron juntas y se pusieron a nadar. Cuando acabaron dijeron:
- ¡Qué calor!
Entonces se le ocurrió a una:
- ¡Vamos a tomarnos un helado!
Todas las gotas de agua fueron en camino hasta la heladería. Cuando
llegaron, cada una pidió un helado de su sabor favorito:
- ¡Yo de chocolate! dice una.
- ¡Yo de menta! dijo la segunda.
- ¡Yo de fresa! dijo la tercera.
- ¡Yo de vainilla! dijo la cuarta.
- ¡Y yo de limón! dijo la última.
Cuando las gotas de agua se comieron el helado (el cual les gustó mucho)
- ¡Qué bueno estaba el helado! dijo una.
- ¡Si es verdad! ¡Vámonos a la playa!
Fueron a la playa que estaba cerca de allí. Cuando llegaron, se dieron un
baño. El agua estaba muy bien.
- ¡Ah, qué agustito se está! dijo una.
Cuando todas se dieron un baño, se dieron cuenta de que estaban en el mar
Mediterráneo y después, dieron todas juntas, un paseo por la orilla de la
playa, pasaron un día muy bueno.
Por la tarde todas las gotas fueron a su casa y comieron y luego se fueron
a la cama.
- ¡Qué día más divertido hemos pasado hoy! dijo una de las gotas de
agua.
- ¡Sí! -dijo otra.
Bueno amigas, buenas noches dijo una que estaba muy cansada.
- ¡Buenas noches!
-dijeron todas.
ADRIÁN MARTÍNEZ NAVARRO
Érase una vez, una gota de agua que cayó en el río Segura, de la vertiente
atlántica. Esa gota se encontró con una esponja de mar, que también servía para
bañarse.
La gota de agua y la esponja se hicieron amigas y juntos recorrieron
valles, montañas y pueblos, que había en las orillas, conocieron a mucha gente,
que se bañaba en sus aguas, hasta que llegaron al final de viaje y tuvieron que
despedirse.
DANIEL MONDÉJAR QUESADA
UNA GOTA DE AGUA
Erase una vez una gota de agua, que se deslizó por un árbol y se cayó
al río Miño que desemboca en la vertiente Atlántica. La gota le dijo a otra
gota: voy a coger el bote y la otra gota le dijo, ¿qué bote? ¿El de pescar?
¡No¡ el bote de cristal para coger hormigas de alas, pero se dio cuenta que no
tenia manos, pasó por todos los ríos de España. Cuando pasó por el río Duero
que desemboca en la vertiente Atlántica se dio cuenta que el agua estaba muy
fría y el río tenía mucha agua, pensó que sería invierno. Después pasó por el
río Tajo y encontró que las flores estaban saliendo y a la gota le gustó verlo,
así que se dio cuenta que era primavera. Luego pasó por el Guadiana y el agua
estaba un poquito más caliente, supo que era verano y conoció a otra gota muy
parecida a ella y se hicieron amigas, de seguido también pasó por el río
Guadalquivir y le gustó mucho todo su recorrido se lo pasó muy bien y su
desembocadura es igual que la del río Guadiana, los dos desembocan en la
vertiente Atlántica. Después salió a la vertiente Mediterránea, que pasó por el
río Segura y a continuación visitó el río Júcar y notó que el agua tenía muchas
hojas así que se dio cuenta que era otoño y por último siguió por la vertiente
Mediterránea y se encontró con el río Ebro y vio que estos tres ríos desembocan
en la misma vertiente que es la Mediterránea y se quedó allí para
siempre.
JAVIER PADILLA NAVARRETE
LA HISTORIA SOBRE LA GOTA DE AGUA DEL RÍO GUADALQUIVIR
Nos encontramos en el océano Atlántico, bajo un sol que está ocasionando la
evaporación de millones de litros de agua.
Esta agua evaporada genera nubes, las cuales son desplazadas hacia las
zonas más altas del valle del Guadalquivir, y es justo aquí, donde el vapor de
agua se condensa cambiando de estado, a líquido y cayendo a la tierra en forma
de gota.
La gota ha caído en la sierra de Cazorla, justo en el nacimiento del rio
Guadalquivir.
Este río pasa por los siguientes lugares; Jaén (Sierra de Cazorla, curso
alto del río), Córdoba, Almería, Granada, Málaga (Curso medio del río) y
finalmente por Sevilla, Huelva y Cádiz (curso bajo del río), desembocando en la
localidad de Sanlúcar de Barrameda donde descansa en un banco, sin sentarse,
sino de peces.
ALEJANDRO RAMÍREZ QUEVEDO
En la nube había muchas gotas de agua, la más lista era Gotín, que quería
conocer el mar. Un día de primavera se dejó caer en la Sierra de
Cazorla y conoció al rio Guadalquivir. Se hicieron amigos y se fue con él en
busca de aventuras, pasaron por Andújar, Córdoba, Sevilla.
Gotín se encontró un canal de peces, los cuales quisieron llevarle hacia el
mar, pero Gotín quería saber cómo se llama el mar. Los peces le dijeron que no
era un mar sino un océano llamado Atlántico.
A los pocos días llegó al océano, y se dio cuenta que estaba salado y no le
gustó. Así que le pidió al sol que lo llevara de vuelta a las nubes.
Volvió a las nubes y les contó a sus amigos su gran aventura.
ISMAEL RUIZ SÁNCHEZ
LA GOTA PERDIDA
En una noche, un día lluvioso, una gota. Esa gota llamada Carín, cayó en
una flor roja como un montón de mariposas.
La gota se separó de su familia se sentía melancólica, estaba
preocupada, estaba realmente perdida.
Se encontró un mar, el mar Mediterráneo, se ve en ese mar, algas marinas.
Se comía las algas, una detrás de otra, parecía un tiburón.
Se encontró un barco, el barco Mar Mediterráneo. Se montó en ese barco
Va navegando.
En una isla del mar
Mediterráneo, se encontraba un pavo, Benjamín, con coleta, parecía un coletas…
de rabo de toro.
Le preguntó la gota: ¿Tú
toreas? Y le dijo que sí.
Se fueron a la plaza
todos los pavos diciendo: Ole, ole, ole, ole. Y se abrazaron.
¿Me llevas a mi casa?.
Sí, por qué no.
No me digas, gracias.
Hasta el océano
Atlántico…
CARLOS URBANO
EL MOVIMIENTO CONTINUO DEL AGUA
Esta era una de agua que cayó de una nube de agua y que cayó en un río
llamado Tajo, estaba cerca del mar. El río iba bastante rápido
porque su montaña estaba cerca del mar y del rio Tajo fue al río Segura que
estaba mucho más cerca del mar y había dos personas pescando una carpa en el
rio Segura, se llamaban Sergio y Francisco. El río pasaba por Huelva, Cádiz,
Segura de la Sierra, Almería, Málaga, Córdoba... hasta que llegó a su destino,
la vertiente Mediterráneo
SERGIO VALERO CRUZ
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